El endometrio es un órgano dinámico durante los años reproductivos de la mujer y se ve afectado por cambios hormonales cíclicos. La perimenopausia es una fase de transición de la vida de una mujer que se caracteriza por ciclos irregulares y un entorno hormonal fluctuante. El sangrado uterino anormal representa la mayoría de las consultas ginecológicas y es el motivo de dos tercios de todas las histerectomías. El examen del sangrado uterino anormal debe excluir específicamente el cáncer de endometrio y sus lesiones precursoras, la hiperplasia endometrial y otras lesiones graves.
La ecografía transvaginal (TVS), una técnica sencilla y no invasiva para la evaluación endometrial, desempeña un papel importante en este sentido. El uso de sondas transvaginales de alta resolución y Doppler color ha mejorado aún más la capacidad de estudiar condiciones más allá del grosor endometrial. Hallazgos como engrosamiento focal, heterogeneidad endometrial, engrosamiento endometrial irregular, lesiones de masa polipoide, derrame intrauterino y rotura del halo subendometrial exigen una evaluación adicional para descartar patología grave, incluso si el espesor de la película intrauterina es normal.
En las mujeres posmenopáusicas, el valor límite para una evaluación adicional del grosor endometrial está casi establecido. Sin embargo, en las mujeres perimenopáusicas faltan criterios de corte claros para el grosor endometrial anormal. Este estudio buscó correlacionar el espesor endometrial evaluado por TVS con anomalías histopatológicas en mujeres perimenopáusicas y posmenopáusicas.
El presente estudio de Mishra et al tuvo como objetivo lograr los siguientes objetivos: 1. Evaluación del espesor endometrial mediante ecografía transvaginal. 2. Comprender la correlación entre la histopatología y el grosor del endometrio en el sangrado uterino anormal (SUA) en mujeres perimenopáusicas y posmenopáusicas. 3. Este estudio también reveló varias causas de SUA en PALM-COIEN prevalentes en nuestra región. 4. Encuentre el valor de corte del espesor endometrial que diferencia la histología anormal de la normal.
Este fue un estudio observacional de 242 mujeres perimenopáusicas y posmenopáusicas de ≥40 años con sangrado uterino anormal (SUA). Según la curva ROC, el punto crítico que define la histología anormal y el tejido normal en el espesor endometrial fue de 14,20 mm. El área bajo la curva (AUC) fue de 0,783, el IC del 95 % fue de 0,686 – 0,880, la sensibilidad fue del 71 % y la especificidad fue del 90 % (p < 0,001)
En este estudio, las pacientes que asisten a clínicas de ginecología pueden presentar una variedad de sangrado uterino perimenopáusico anormal. Entre ellos, se encontró que la menorragia y los ciclos menstruales frecuentes estaban asociados con patología ginecológica en estos grupos de edad. Para todos los sangrados uterinos perimenopáusicos anormales, la mejor prueba inicial es la ecografía transvaginal para medir el grosor del endometrio. La incorporación del Doppler color es complementaria y mejora aún más la precisión diagnóstica de la evaluación endometrial. Todo sangrado uterino perimenopáusico anormal con un límite igual o superior a 13 mm debe someterse a una biopsia endometrial para examen histopatológico. Sin embargo, se debe considerar la biopsia endometrial, independientemente del grosor, en pacientes con resultados Doppler positivos, anomalías focales, factores de riesgo coexistentes (p. ej., obesidad, diabetes, edad mayor o igual a 45 años) o la presencia de sangrado posmenopáusico, independientemente del grosor. de espesor, como en pacientes con La probabilidad de patología endometrial grave es mayor.
Fuente: Mishra et al/Indian Journal of Obstetrics and Gynecology Research 2024;11(2):185–190
https://doi.org/10.18231/j.ijogr.2024.038